21 días conviviendo con un panadero.

¡Que bueno es tu programa, y que bien lo haces, Samanta!

Día 1: Durmiendo
Día 2: Durmiendo
Día 3: Comiendo y durmiendo
Día 4: ¡Silencio que está durmiendo!
Día 5: Comiendo, trabajando y durmiendo
Día 6: ¡Vecinos! ¡Silencio! ¡Que duerme el panadero!
Día 7: ¡Calla, perrito, no ladres!
Día 8: ¡No me levanto ni a hacerme un bizcocho!
Día 9: ¡No me levanto, que llueve!
Día 10: ¡Me voy que se queman las baguettes!
Día Décimo-primero: ¡Se rompe el somier entero!
Día Décimo-segundo: ¡No veo ni el Sol ni el Mundo!
Día Décimo-tercero: ¡No veo a mi hijo ni con él juego!
Día Décimo-cuarto: ¡No voy de Vacaciones y siempre me aguanto!
Día Décimo-quinto: ¡Tengo tanta calor que casi me asfixio!
Día Décimo-sexto: En la sobremesa me acuesto...
Día 17: ¡Me levanto a las nueve a la velocidad de un cohete!
Día Décimo-octavo: ¡No veo la Navidad ni el pavo!
Día Décimo-noveno: ¡Me pierdo los días de fiesta más buenos!
Día Vigésimo: ¡Esto es un trabajo muy pésimo!
Día 21: ¡Se ha dormido su mujer y su hijo de puro aburrimiento! ¡Ni Samanta ni los reporteros, despierto no ha quedado ninguno!

¡Que esperiencia tan aburrida!...¡Peor que la de 21 días con una gallina! ¡Por lo menos las gallinas decían "Kikiriki" y ponían huevos! ¡Lo que al otro se le iban a cocer de tanto dormir!

Isabel Gómez de la Torre, "La poeta coplera".